Charly en la noche del Orfeo (foto: Facundo Luque / La Voz) |
RECITALES
Por
Néstor Pousa © 2012
Charly
García
regresaba a Córdoba a ofrecer un nuevo recital con el propósito de presentar en
la Docta su flamante álbum antológico 60x60 -coordenadas de los 60 años
del músico y la década donde todo comenzó- una colección con los temas más
representativos de su carrera, con versiones refrescadas y grabadas en vivo en
el Teatro Gran Rex de Buenos Aires, entre el 27 de octubre y 1 de diciembre de
2011. Todo empaquetado en un box set con 3 cds, 3 dvds y mucho material gráfico
que pretende estimular el adormecido perfil coleccionista del fan e intentando
contrarrestar la cultura mp3 que
tanto desaprueba Charly. Una colección sin dudas ambiciosa y por cierto
impecable, con la que pretende cerrar un ciclo.
La ocasión era inmejorable, el último
registro en directo de García en la provincia lo teníamos del Cosquín Rock 2012,
esa vez su concierto homenaje a Spinetta tuvo las dosis precisas de emoción,
lucidez y profesionalismo. Todo hacía pensar que en el marco contenedor del Orfeo,
el show se potenciaría. Nada hacía presagiar un final abrupto.
Este Charly redivivo tiene de su lado dos cosas
fundamentales: un repertorio imbatible, increíblemente vasto y plagado de hits.
En eso se basa el show y el reciente compilado. El otro aspecto es la nueva
formación que lo acompaña, un ensamble de once músicos, con él incluido, dispuestos
en tres bloques que encastran con la precisión que el oído absoluto exige. Por un lado está la banda base, el trío de los
chilenos Kiuge Hayasida en guitarra, Carlos González en bajo y Toño Silvia en
batería. Sigue el trío de los históricos: Carlos García López en guitarra, Zorrito
Von Quintiero en teclados electrónicos y Fernando Samalea en bandoneón,
vibráfono y excentricidades varias. Lo completa una sección de cuerdas con
Alejandro Terán (viola), Christine Brebes (violín) y Julián Gándara (cello) y cierra
la formación Rosario Ortega en coros. Queda presentada así The Prostitution, una formación musicalmente elástica que puede
abordar cualquier etapa musical del jefe, y aunque por momentos trastabilla en las
líneas de bajo de Pedro Aznar y los pases de batería de Moro cuando de abordar
la obra de Seru Giran se trata, todo lo demás es irreprochable.
El preámbulo del show es la proyección en
pantalla de las portadas de todos los discos de García, desde Vida (Sui Generis, 1972) hasta Kill Gil (solista, 2010), una línea de
tiempo de cuarenta años musicalizada con fragmentos de esos discos. A medida
que la reproducción va en progreso es imposible que alguna de esas imágenes y
melodías no hagan centro en tu propia historia. Una vez que con la última tapa
llegamos a nuestros días, aparece la banda con Charly al frente. La
retrospectiva ahora será en modo aleatorio, el show comienza con Los Dinosaurios, sigue con un medley que
unirá los extremos con Tango en segunda
/ El amor espera, y con el homenaje a
Spinetta en Rezo por vos.
Las falencias de Charly en esta etapa están a
la vista, su registro no es el mejor y a veces no concuerda con los coros de la
menor del clan Ortega. Sus desplazamientos no son los de antes y no hay ostentaciones
a la hora de tocar el piano. No obstante
se deberá aceptar que con lo que le queda les pasa el trapo a unos cuantos.
Sin demasiadas palabras se acomoda para un show
largo de 25 canciones, y la temperatura va en ascenso. Es el turno de Cerca de la revolución, el súper hit del
repertorio, y caprichosamente pasa por No
soy un extraño, No importa, Pasajera en trance, Asesíname e Influencia; y
la lista empieza a demoler. Entonces para la pelota y avisa: “Vamos a hacer dos temas, Rap del exilio e Instituciones, y después vamos a pasar una
película que es el mayor exponente del surrealismo, espero les guste, si no
saben que es surrealismo, busquen en internet”, desafía. Todo funciona
según el plan, Instituciones (Sui
Generis, 1974) es la mejor lograda de las versiones modelo 2012; en cuanto al
cortometraje, se trata de Un perro
andaluz de Luis Buñuel, con la voz en
off de Graciela Borges recitando en prosa poética frases de canciones de
García sobre fondo de Pubis angelical.
Es el momento cumbre del show, todo está a punto para redondear una gran noche.
Después del intermedio la banda arremete con Piano Bar, Yendo de la Cama
al Living y otro medley con La grasa
de las capitales / Me siento mucho
mejor. Habíamos superado más de la mitad del show cuando ocurrió lo que
nadie esperaba, fue durante Canción de
2x3 que, ante el desconcierto de los músicos, Charly dejó de cantar y dijo:
"Voy a seguir tocando", y un
segundo después se desplomó de su banqueta, desvaneciéndose sin llegar a perder
el conocimiento por completo, el estadio enmudeció, las luces del escenario se
apagaron y se alcanzó a ver como dos asistentes ayudaban al músico a retirarse mientras
balbuceaba pedidos de disculpas.
Siguieron 45 minutos de incertidumbre y
preocupación durante los cuales el Negro García López debió salir en dos
oportunidades: en la primera, guitarra en mano, pidió perdón por el susto, dijo
que a Charly se le había bajado la presión y que volverían para terminar el
show. En la segunda, secundado por el Zorrito Von Quintiero, avisó que por
prescripción médica el show se debía suspender. "El Flaco quiere seguir pero no lo dejan, faltaban los mejores 5
temas finales, muchas gracias por el aguante", dijo el guitarrista
acompañado por toda la banda. En realidad de la lista prevista faltaban 10 canciones,
pero igualmente el público que colmó el domo cordobés se retiró con un cerrado
aplauso, sin reproches y con la sensación de que el incidente no había pasado
de ser un gran susto, aunque, debería servir para replantear algunas cuestiones
sobre el presente del ídolo.-
Nota: show realizado el sábado 09/06/12 en el Orfeo Superdomo de Córdoba ante 5.000 personas. Suspendido a la hora y cuarto de haber comenzado.-